De Corazón a corazón: Ex 32,15-24.30-34 (La adoración del becerro de oro); Mt 13,31-35 ("El Reino de los cielos… grano de mostaza… levadura")

Contemplación, vivencia, misión: Las obras de Dios son a la medida de su amor. Por esto desbordan nuestros esquemas, cálculos y preferencias. El grano de mostaza y el puñado de levadura son el "microcosmos" de las maravillas divinas en la historia de salvación. Dios tiene sus preferencias en los "pobres" y en la vida ocultad de Nazaret. Cuando se busca a Dios interesadamente, se corre el riesgo de convertir nuestras falsas esperanzas en un ídolo. Dios permite que se nos vayan cayendo esos ídolos que originan todas las tragedias humanas y toda las guerras.

*En el día a día con la Madre de Jesús: María preparaba "el pan nuestro de cada día" poniendo un puñado de levadura en la masa de harina. Este trabajo sencillo de Nazaret le hacía vivir en sintonía con "el pan de vida" que es Jesús. Se es levadura en la medida en que uno es pan partido.

AÑO DE LA FE: "la Iglesia nunca presupone la fe como algo descontado, sino que sabe que este don de Dios tiene que ser alimentado y robustecido para que siga su camino" (Lumen Fidei n.6)