De Corazón a corazón: Rom 5,12-21 ("Por la obediencia de uno solo, todos serán constituidos justos… por Jesucristo nuestro Señor"); Lc 12,35-38 ("Estén ceñidos vuestros lomos y las lámparas encendidas, como quienes esperan a su señor que vuelva de la boda").

Contemplación, vivencia, misión: Si la vida se comparte con Cristo (nuestro esposo o "consorte", amigo, hermano), las dificultades se convierten en sorpresas de su amor y no en sustos. Es verdad que la creación y la historia humana están llenas de consecuencias del pecado; pero la gracia de Cristo, muerto por nuestros pecados y resucitado para nuestra justificación, es más poderosa, si le dejamos a él compartir nuestra vida.

*En el día a día con la Madre de Jesús: María es la "llena de gracia" y la "Inmaculada" para cooperar con Cristo en nuestra santificación; "por esto es nuestra Madre en el orden de la gracia" (LG 61).

AÑO DE LA FE: "El conocimiento de la fe, por nacer del amor de Dios que establece la alianza, ilumina un camino en la historia… Dios mantiene sus promesas y permite comprender su designio a lo largo del tiempo" (Lumen Fidei, n.28)