Viernes semana séptima de Pascua (25 mayo 2012)

De Corazón a corazón: Hech 25,13-21 ("Jesús… de quien Pablo dice que vive"); Jn 21,15-19 ("¿Me amas más?... Apacienta mis ovejas… Sígueme")

Contemplación, vivencia, misión: Los Apóstoles vivían pendientes de la presencia real de Cristo resucitado. Su primer encuentro se actualizaba continuamente en la vida ordinaria. A Cristo se le ama en la medida en que uno se preocupa por hacerle amar. El pasado, que tiene sus luces y sus sombras, queda siempre diluido y transformado en el Corazón de Cristo Amigo.

*En el día a día con la Madre de Jesús: El examen de amor para la misión recuerda la declaración de amistad mutua en la Última Cena (cfr. Jn 15). El último "sígueme" recuerda el "seguimiento" evangélico de Cristo "con su Madre" (Jn 2,12). María se dejó sorprender por el proyecto del Padre, por las palabras de Jesús y por la acción del Espíritu Santo.