De Corazón a corazón: 1Re 19,19-21 ("Elías encontró a Eliseo y le echó su manto encima"); Mt 5,33-37 ("Sea vuestro lenguaje «sí, sí», «no, no»")

Contemplación, vivencia, misión: La vida ordinaria está llena de detalles y gestos sencillos que indican convivencia familiar. Sonreír o dar la mano con autenticidad, puede ayudar al hermano a encontrar sentido a la vida. Las palabras, si no nacen del corazón, son hojarasca que se lleva el viento. El espíritu del mal es el espíritu de la mentira y de la falsedad. La vida es "cristiana", si se concreta en construir  con Cristo  una comunidad basada en "la verdad de la caridad" (Ef 4,56).

*En el día a día con la Madre de Jesús: Un "sí" auténtico, como el de María (Lc 1,38), da sentido a todas y cada una de las palabras del "Magnífiicat".

*Alegría del Evangelio, renovación misionera: "Ella es la esclavita del Padre que se estremece en la alabanza. Ella es la amiga siempre atenta para que no falte el vino en nuestras vidas" (Evangelii Gaudium, n.286)