De Corazón a corazón: Sant 5,1-6 ("Ricos, llorad… vuestra riqueza está podrida… el salario que no habéis pagado, está gritando"); Mc 9,41-50 ("Un vaso de agua… no perderá su recompensa… Tened paz unos con otros")

Contemplación, vivencia, misión: La realidad social es un enigma cuando las riquezas se acumulan en unos pocos, olvidando que los dones de Dios sólo se conservan y aumentan, cuando se comparten, La caridad verdadera se hace "promocional" al proporcionar al hermano los medios honestos para salir de sus limitaciones y valerse por sí mismo. Los consejos de Jesús se concretan en una vida sencilla de convivencia, donde en todo rostro se refleja la atención por los demás. Las personas humildes y generosas, al no buscarse a sí mismas, dejan huellas del evangelio en todas partes.

*En el día a día con la Madre de Jesús: A veces, basta un pequeño detalle de atención a lo que los demás necesitan, como en Caná cuando escaseó el vino en la boda.

*Alegría del Evangelio, renovación misionera: "El obispo siempre debe fomentar la comunión misionera en su Iglesia diocesana siguiendo el ideal de las primeras comunidades cristianas, donde los creyentes tenían un solo corazón y una sola alma (cf. Hech 4,32)" (Evangelii Gaudium, n.31)