De Corazón a corazón: Hech 25,13-21 ("Jesús… de quien Pablo dice que vive"); Jn 21,15-19 ("¿Me amas más?... Apacienta mis ovejas… Sígueme")

Contemplación, vivencia, misión: Los Apóstoles vivían pendientes de la presencia real de Cristo resucitado. El encuentro con él se actualizaba continuamente en la vida ordinaria. Se le ama en la medida en que uno se preocupa por hacerlo amar. El pasado, que tiene sus luces y sus sombras, queda diluido y transformado en el Corazón de Cristo Amigo.

*En el día a día con la Madre de Jesús: El examen de amor para la misión recuerda la declaración de amistad mutua en la Última Cena (cfr. Jn 15). El último "sígueme" recuerda el "seguimiento" evangélico de Cristo "con su Madre" (Jn 2,12).

AÑO DE LA FE: "El Espíritu Santo nos enseña a mirar con los ojos de Cristo, a vivir la vida como la ha vivido Cristo, a comprender la vida como la ha comprendido Cristo" (Papa Francisco, 8 mayo 2013)